Referentes

Desde que comenzó la crisis del coronavirus, EL PAÍS se ha ido adaptando a una situación desconocida. ¿Qué cambios esperan al periodismo, cómo será la relación con los lectores, cuál será la misión de las grandes cabeceras? La directora de EL PAÍS, Soledad Gallego-Díaz, y Montserrat Domínguez conversan sobre los retos del periodismo. Dentro de esa transformación, el diario pone en marcha un modelo de suscripción que quiere ser un pacto de compromiso con los lectores.

El diario EL PAÍS iniciará en las próximas semanas una importante etapa para garantizar un periodismo profesional y de calidad. Como otras cabeceras globales, empieza una estrategia de suscripciones digitales. Los lectores podrán entrar en la web pero después del décimo artículo al mes necesitarán suscribirse para leer más. El precio será de 10 euros al mes, con una oferta de un euro el primero. En conversación con Montserrat Domínguez, Soledad Gallego-Díaz explica qué hay detrás de este movimiento estratégico.

La periodista Soledad Gallego - Díaz es todo un referente en el mundo de la comunicación. Ha sido corresponsal y directora adjunta de El diario El País donde sigue participando como columnista además de colaborar en el programa 'Hoy por Hoy' de la Cadena SER. A lo largo de su trayectoria ha sido galardonada con numerosos premios como el Premio Salvador de Madariaga o el Premio Margarita Rivière. Este año recibe el Premio Orega y Gasset de periodismo español por su Trayectoria Profesional y con este motivo charla con el periodista Juan Cruz.Gallego - Díaz destaca la importancia de mantener un constante contacto con la realidad, vivir para poder contarlo. Y de contextualizar las noticias para poder entenderlas. En el periodismo de hoy en día tendemos a preguntarnos más por el "¿quién?" y menos por el contexto en el que está ocurriendo. Una práctica que los periodistas deben modificar y mejorar.Noticias, radio, periodismo y "armas de distracción masiva" son los temas de debate de esta conversación entre Juan Cru

Las protagonistas de este episodio no tuvieron un amplio abanico de referentes femeninos cuando empezaron sus carreras. El camino para el reconocimiento de la mujer en el mundo laboral y de la investigación aún sigue siendo largo y arduo. Pero ellas ya lo han conseguido. Ambas son, en sus respectivos campos, figuras destacadas en nuestro país. María Blasco es una de las científicas más importantes en el mundo de la bioquímica y la biología molecular. Lleva más de veinte años estudiando los telómeros y la telomerasa y todavía sigue sintiendo la misma pasión por ello. Estudió en la Universidad Autónoma de Madrid, se doctoró bajo la dirección de Margarita Salas para después cruzar el Atlántico y trabajar con la Doctora Carol Greider, descubridora de la telomerasa y Premio Nobel de Medicina. Ha trabajado en el CSIC y en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, del que es directora desde el año 2011. Montserrat Domínguez tuvo un camino similar al de Blasco. Se licenció en Ciencias de la Información en Ma

Los Referentes de este episodio pertenecen a la generación de periodistas de trazo propio. El rigor y la claridad siempre estaban, y están aún presentes en sus artículos, pero también el estilo y el lenguaje característicos de cada uno.El periodista y escritor Juan Cruz es el encargado de ir marcando las pausas, los signos de puntuación, las negritas y los destacados de la entrevista. Estudió Periodismo e Historia en la Universidad de la Laguna, su acento y su moreno canario aún le delatan. Y es uno de los cofundadores del periódico El País donde comenzó como corresponsal en Londres.Escritor, periodista, profesor, Juan Cruz lleva desde los trece años en el mundo de las letras y aún no conoce el silencio o la página en blanco. Ha sido galardonado con numerosos premios entre los que destaca el Premio Nacional de Periodismo Cultural en 2012.En la otra página, Miguel Ángel Bastenier, escritor, columnista, editor, historiador y, sobre todo, una eminencia en el mundo del periodismo. Licenciado en Derecho, Historia,

Como todos los creadores de vida y mutadores de genética, Francisco García Olmedo es uno de esos personajes cargados de polémica. Sus manos fueron artífices de las primeras plantas transgénicas españolas vendidas en el mercado internacional. Es catedrático de Bioquímica y Biología Molecular en la Universidad Politécnica de Madrid y experto en ingeniería genética. Sus investigaciones establecen que la alteración molecular de los alimentos permite la reducción de la contaminación y efecto invernadero además de paliar el hambre en el mundo. Afirmaciones siempre controvertidas que desatan partidarios y detractores a partes iguales.Con su, casi imperceptible, acento gaditano, lucha contra la demonización de los transgénicos a través de la biotecnología agraria y advierte sobre la ortorexia: la creciente obsesión por comer sano que se está implantando en nuestros cuerpos y en los envasados con la etiqueta “Bio”. Su interlocutor es Joaquín Estefanía, licenciado en Ciencias Económicas y Ciencias de la Infor

Antonio Garrigues iba para futbolista. Tanto, que firmó un contrato para jugar en el Atlético de Madrid. Pero el día que apareció en casa con el uniforme y las botas en la mano su padre le dijo que volviera por donde había venido, y  devolviera todo el material. Lo que tenía que hacer, era estudiar. Sería abogado. Así que eso hizo.Con 27 años ya presidía el despacho que habían fundado su padre y su tío: Garrigues. No sin esfuerzo ha conseguido situarlo entre uno de los despachos más prestigiosos de Europa con más de 1800 abogados contratados. Todos los veranos representa en su casa de Sotogrande obras de teatro que él mismo escribe. Políglota, viajero y curioso incansable, intentó ser político en los años 80, fundando un partido de centro que no llegó a nada. Su padre fue muy amigo del matrimonio Kennedy, pues era embajador español en EEUU durante su mandato y, Antonio, desde muy joven, creyó en la enorme importancia de la globalización. Sobre todos estos asuntos conversa con Iñaki Gabilon